En las últimas décadas se han realizado importantes descubrimientos en el entorno de la Sierra de Cantabria, en la comarca de Rioja Alavesa. La presencia en el territorio de grupos pioneros neolíticos desde el VI milenio Cal BC, unido al uso de los abrigos rocosos como rediles estacionales, ofrecen un panorama muy diferente al que se tenía hace tan solo unos años sobre los inicios de la economía de producción en la región vasca. Además en ese mismo entorno se localizan hasta nueve arquitecturas funerarias que han sido sometidas, igualmente, a revisión. Todo ello ha propiciado una estrategia de investigación en la que se ha podido conjugar los estudios de polen, carbón, fitolitos, industria lítica, cerámica, materiales en hueso, ADN humano y animal, estudios de residuos de estanoles y ácidos biliares, micromorfología, etc. En el presente trabajo se pretende ofrecer una visión global sobre la implantación y primeras etapas de la economía de producción mediante el estudio de algunos de los materiales recuperados en niveles Neolíticos y Calcolíticos.